01 de sep de 2012
(Caracas, 1 de septiembre- Noticias24)-
Explicó que desde hace tres años vende Kino “para poder sobrevivir al día a día, aunque económicamente no meda lo suficiente para mantener a mi familia”. Al tiempo que recalcó que labora desde las 6:30 de la mañana hasta las 7:30 de la noche.
González indicó que de su trabajo lo que más se le hace difícil es trasladarse, pues vive en Santa Teresa del Tuy y diariamente tiene que tomar el Ferrocarril hasta Caracas, en medio de los empujones a los cuales afirmó “estar acostumbrado”.
“Lo más difícil de mi trabajo es trasladarme en el Ferrocarril porque tarda mucho en llegar y se llena. Entonces para entrar cuesta; es un sacrificio pero no me importa”, puntualizó.
Sin embargo, insistió que en algunas ocasiones los usuarios del sistema ferroviario lo ayudan dándole permiso para poder abordarlo.
Al ser consultado si buscaría un empleo en Los Valles del Tuy respondió: ¡No he pensado en trabajar allá porque en Caracas se mueve más el dinero!
En este orden de ideas, González destacó que la silla de ruedas no es un impedimiento para trabajar, “yo tengo que esforzarme por verder todos los talonarios ya que sino debo pagarlos. Cuando llueve busco un refugio y continuo laborando trabajo en Capitolio, La Hoyada y en la tarde en Chacao”.
“He dado premios a muchos ganadores”
El vendedor de Kino también afirmó que su trabajo lo hace feliz porque ve sonrisas dibujadas en los rostros de las personas al momento de ganar, destacando: “He dado muchos premios a los ganadores, aunque no el millonario”.
En este orden de ideas aseguró que le gusta su trabajo, pero “no pierdo las esperanzas de laborar en una empresa o un banco a pesar de mi discapacidad”.
Finalmente este vendedor de Kino envió el siguiente mensaje a los venezolanos: “Salgan a trabajar, porque yo comencé a los 14 años y estoy orgulloso”, concluyó.