La finalidad de este proyecto es evitar que este colectivo pueda sufrir cualquier tipo de “infoexclusión” y favorecer su integración gracias al entorno en el que se desarrolla la actividad y que permite a todos los alumnos del Aula Konecta-UCM tener a su disposición las instalaciones y servicios de la universidad.
Además, este proyecto desarrollado gracias al acuerdo entre Fundación Konecta y la Asociación Española de Normalización y Certificación (AENOR), facilita una mayor sensibilización y acercamiento hacia la discapacidad por parte de los profesores y alumnos de la universidad.
La presidenta de la FSDM, María Barón, ha explicado que esta iniciativa ayuda a la integración laboral y a la normalización de los alumnos y ha señalado que el reto es que los jóvenes sean emprendedores gracias al desarrollo de los recursos que se ofrecen.
Así, Barón ha afirmado que gracias a este proyecto puesto en marcha hace cuatro años “se ayuda a poner la tecnología al alcance de las personas con discapacidad”.
El Aula Konecta – UCM se enmarca dentro del llamado Proyecto TIC, que la FSDM puso en marcha hace casi 11 años en colaboración con otras entidades, entre las que se encuentra la Fundación Konecta, con el objetivo de acercar las tecnologías de la información y las comunicaciones a personas con discapacidad intelectual.